Por Gustavo Rodríguez:
Hace unas semanas llegué a la cúspide de mi blanqueamiento.
Estaba en uno de esos almuerzos que se sirven con tres tenedores y tres
copas al frente cuando mi compañero de mesa, hermano de un ministro, me
preguntó:
–Tú estudiaste en el Markham, ¿verdad?
Pocos saben que mi relación con las aulas se inició en...