Desde que asumió su pontificado, Francisco ha sido firme en el mensaje que la iglesia tiene en estar más cerca de... la población y de ayudar a los más necesitados. Entre aplausos y ovaciones de miles de asistentes el Papa se dirigió desde lo alto de un palco pintado de blanco y amarillo, colores del Vaticano.
Es allí donde el pontífice criticó la cultura del egoísmo y el individualismo que caracteriza al mundo contemporáneo y alentó a los esfuerzos de Brasil que luchan contra el hambre y la miseria.
Finalmente, miles de fieles se reunieron en la favela para recibir al papa Francisco, quien caminó hasta el lugar en medio de fieles que se acercaban y a los saludaba con la mano o con una palmada en el brazo.
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