abrazo, en un beso. Que es natural amanecer y que aparezca antes que todo, antes que el trabajo, antes de las obligaciones, antes del desayuno.
Poema XLV*
Cuéntele de mis mil y una aventuras por aparecer en su casa.
Díganle que en verano y en invierno, bajo el sol y la luna, la he querido cerca.
Explíquenle que me partí en dos para que algo de mi se quedara en ella
y algo de ella siempre se queda en mi.
Busquen palabras para describirla, ¡los reto!
Porque yo no he encontrado palabras que se asemejen.
Háblenle del amor que le tengo, más grande que un beso
y nunca tan pequeño como cuando, tomándola de la mano,
algo pasa y mi mano ya no es mía si no de ella y su mano ahora es mía reemplazando la que le he dado.
Díganle, cuando muera, que la he amado y he sido feliz.
* De un poemario en el que trabajo.
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