En el simulacro de votación realizado por Gfk revela que un 49% de limeños prefirió el Sí y un 38% el no; entre los votos blancos y viciados se obtiene el 8% y 5% respectivamente. Si se considerara solo los votos válidos, el Sí llegaría al 57% y el No al 43%.
Para los expertos, esta intención de voto, hecha del 18 al 20 de febrero con un total de 666 encuestados, tiene un final de...
pronóstico reservado. La diferencia porcentual entre el simulacro del voto y la encuesta (11% vs. 18%) muestra que podría existir un voto oculto favorable a la alcaldesa de Lima, Susana Villarán, pero también la confusión generada por la cédula y las opciones planteadas, indicó el director del Instituto de Opinión Pública de la PUCP, David Sulmont.
Asimismo, Sulmont señaló que el No habría aumentado su apoyo gracias a una mayor visibilidad en las últimas semanas, sin embargo, advirtió que todavía la alcaldesa y los regidores enfrentan un panorama complicado. Por otra parte, explicó que el Sí ha caído debido a la campaña basada en críticas que no presenta alternativas.
En cuanto a la desinformación y el desinterés por la política, el director de Vox Pópuli, Luis Benavente, considera que es una constante en nuestro país y que crea confusión en los procesos electorales.
“Esta vez la confusión es mayor, pues según el estudio el 98% votará al Sí o al No, y solo 2% está en la categoría No sabe, no opina, porcentajes que se oponen al 14% de voto blanco o viciado de la simulación. A esto se suma que el 14% de votantes confunde el No con el Sí o no responde, y el 13% se inclina a votar a una de las dos opciones, pero admite que podría cambiar de opinión”, indica.
(Con información del diario La República)
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