Los glaciares de esta zona desaparecerán en unos 20 ó 30 años a causa del deshielo por el cambio climático, estiman expertos.
El nevado Alpamayo, en Áncash, es
uno de los nevados que requiere
mayor cuidado. (Internet)
“El Gobierno debería invertir más en el estudio de los glaciares y las lagunas para prevenir desastres naturales”, dijo Carey sobre este problema de derretimiento iniciado en la segunda mitad del siglo XIX, y que se ha acelerado de manera dramática en el último cuarto del siglo XX.
En el pasado, el monitoreo de glaciares y lagunas “ha salvado miles de vidas y protegido infraestructura que vale millones de dólares”, dijo el especialista, que ha estudiado los desastres naturales en la región andina de Perú.
También afirmó que las autoridades solo piensan en el negativo impacto en el turismo y no en los que sufre la población que habita en lugares cercanos.
La Cordillera Blanca, en la zona norte de los Andes de Perú, es la cadena montañosa tropical más alta del mundo y, según cifras oficiales, tiene 722 glaciares y 296 lagunas. Sus nevados atraen a montañistas de todo el mundo.
ALARMA El ingeniero César Portocarrero, de la Unidad de Glaciología, dijo hoy que de los 720 kilómetros cuadrados de glaciares que había en 1970 en Perú, ahora tan solo quedan 510.
En cuanto a la posibilidad de aluviones a causa de sismos, Portocarrero admitió que sí se pueden originar, aunque destacó que ningún estudio ha demostrado que un sismo ocasione deslizamientos de glaciares.
El experto, que señaló que una decena de departamentos registran la influencia del deshielo glacial, pronosticó que los glaciares desaparecerán en unos 20 ó 30 años.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.