En nuestro país las fechas caen con el peso con las que fueron marcadas y es que no son simples aniversarios en medio de una revuelta política sino que no celebran nada y siguen siendo lo que al inicio: muerte, negligencia y rabia. Sin culpables, y nuevamente con el pueblo en contra, el tiempo nos repite que han pasado tres años desde que en la Curva del diablo desapareció el mayor Felipe Bazán y murieron 33 personas, (10 civiles y 23 policías), durante el segundo gobierno de Alan García y en lo que llamamos el ‘baguazo’.
La coyuntura dispara advertencias y consecuencias ante...
las radicales protestas en Espinar (Cusco) y Cajamarca; sin embargo, se sigue subestimando a los pueblos a los que se recurre al parecer solo en época de elecciones y ante la necesidad de ellos como votantes. Con catorce muertos en solo diez meses de gestión y ante la decepción de los pobladores, Ollanta Humala, apegado ahora a la derecha, ve como sus congresistas van renunciando a su bancada, tan decepcionados como la pobladora de Espinar que hace algunos días declaró a los medios dramáticamente y dijo: “yo voté por ti, Ollanta, y tú me haces matar, mina no queremos”.
Tres años atrás y antes de los conflictos mineros, la aprista Mercedes Cabanillas tenía a su cargo el ministerio del Interior y es a ella a quien apuntarían como uno de los responsables directos por la violenta reacción del gobierno ante la protesta indígena. Por su parte, la abogada de la Asociación Pro Derechos Humanos (Aprodeh), Melissa Ramírez, declaró “Agotaremos todas las instancias para revertir las injusticias, así como para incluir a Cabanillas en el juicio y demostrar su responsabilidad política. Si es preciso, iremos a instancias internacionales”, aseguró.
Como se sabe, solo unos días después del ‘baguazo’ se derogaron los decretos ley contra la selva peruana con que iniciaron la protesta, sin embargo, hasta el momento no hay culpables y el mayor Felipe Bazán continúa desaparecido. Los pueblos indígenas amazónicos que integran el pacto de unidad en medio de un comunicado y ante la coyuntura dijeron: “Somos Sujetos y nunca más objetos”, afirmando además que el desarrollo que les ofrecía el gobierno era solo para una élite y que solo los dejaría sumidos en más pobreza, depredación y la represión a la que temen desde el 5 de junio del 2009.
Por lo pronto no hay sanciones judiciales, y los defensores de derechos humanos consideran que el proceso por el que se inculpa a los nativos que participaron en la toma de la estación 6 de Petroperú debe volver a cero, ya que la fiscalía no tendría pruebas directas, además de no haber testigos que reconozcan a los inculpados en la captura de policías. Cabe recalcar que este es un caso de responsabilidades políticas, donde por negligencias de gestión y subestimar a los pueblos, criminalizando la protesta social, murieron civiles y policías en uno de los hechos más violentos que afrontó nuestro país en los últimos años.
Cecilia Podestá
cpodesta@diario16.com.pe
Fuente: http://diario16.pe/noticia/16629-quien-aprendiao-de-bagua-que-levante-su-banda-presidencial
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