*-*

Las cosas que uno medita mucho o quiere que sean 'perfectas', generalmente nunca se empiezan a hacer...
*-*
"Cada mañana, miles de personas reanudan la búsqueda inútil y desesperada de un trabajo. Son los excluidos, una categoría nueva que nos habla tanto de la explosión demográfica como de la incapacidad de esta economía para la que lo único que no cuenta es lo humano". (Ernesto Sábato, Antes del fin)
*-*

lunes, 9 de mayo de 2011

Solo 8 de cada 100 tiene un trabajo decente

Un estudio realizado por el ex viceministro de Promoción del Empleo, Julio Gamero, advierte que solo el 8.2 por ciento de la Población Económicamente Activa (PEA) ocupada tiene un trabajo decente en el Perú y, en esa misma línea, se aprecia que solo uno de cada cinco asalariados tienen trabajo decente; mientras que entre los trabajadores no asalariados prácticamente nadie (0.4%) accede a un trabajo de calidad.

En decir, en el país “estrella de la región” con un modelo económico “exitoso” y “a puertas” de ubicarse entre los países desarrollados es un lujo tener un trabajo decente.

¿Qué se entiende por trabajo decente? Según lo explica Gamero en su estudio, en este punto recoge la definición de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), trabajo decente significa tener un contrato laboral o en caso de no ser asalariado que el respectivo negocio este registrado, una remuneración mayor o igual a la mínima, jornada laboral no mayor a 48 horas semanales y tener algún seguro de salud y afiliación al sistema de pensiones.

Responsabilidad Fujimorista“La situación laboral que se vive hoy en el país tiene su origen en las reformas que fueron aplicadas durante el régimen autoritario (con golpe de Estado incluido) de Alberto Fujimori. En el gobierno de Fujimori se dio inicio a la flexibilización del empleo que facilitó el despido individual y colectivo; a la promoción de contratos temporales (léase los services); a la privación del derecho al seguro social y a las pensiones y al debilitamiento de los sindicatos”, subrayó el portal Trabajando.com

Agregó, que el tras las reformas hechas en la administración Fujimori “el significado de trabajo decente en el Perú simplemente se borró”.

La labor del Estado es el de garantizar un equilibrio entre ambos grupos de interés (empresarios y trabajadores) que garantice que por un lado las empresas sigan operando con sus respectivas tasas de ganancia y por otro que los trabajadores accedan a un trabajo decente como lo es en los países desarrollados.

Sin embargo, tras la precarización de los derechos laborales realizada por el gobierno del ex dictador y padre (Alberto Fujimori) de la ahora candidata a la Presidencia de la República, Keiko Fujimori, se aprecia las exorbitantes tasas de ganancias de las grandes empresas y solo 8 de cada 100 trabajadores con trabajo decente. Ello debido a que la labora fiscalizadora del Estado ha venido a menos en los últimos años a consecuencia de las políticas Fujimoristas.

“La raíz del problema tiene dos caras. Por un lado está la persistencia de un esquema conceptual equívoco en las mentes de muchos “analistas”, columnistas y empresarios que terminan por desinformar y generar falsas premisas en la población como es la satanización del derecho fundamental a la sindicalización o la denominación³ de las vacaciones, gratificaciones y compensación por tiempo de servicios (CTS) como “sobre costos” salariales cuando, bajo cualquier definición legal y económica, son parte del salario anual”, indicó el portar web.

La segunda arista del problema es la ausencia de voluntad por parte del Estado (en estricto de los últimos gobiernos) por no solo plantear, sino sobre todo hacer efectivas “reglas de juego” que equilibren el piso en materia laboral.

Copia a su padreAl revisar el plan de gobierno Fujimorista de Fuerza 2011, se aprecia que en lo referido a materia laboral la señora Keiko Fujimori no marca distancia de lo aplicado anteriormente por su progenitor, por el contrario tiene un propuesta similar de mayor precarización laboral si es que asumiera el cargo de Presidenta de la República

Keiko Fujimori plantea en su plan de gobierno como primer punto de agenda la flexibilización laboral y así se comprometen solo a respetar los derechos laborales de quiénes los tienen; lo que significa respetar a 8 de cada 100 trabajadores en el Perú ¿y los 92 restantes?

“Para esta gran mayoría de la población el plan de Fujimori es claro y propone literalmente “medidas inmediatas destinadas a hacer que los costos que las empresas deben pagar al contratar trabajadores se reduzcan considerablemente. El discurso es el mismo, no dejemos que la historia se repita”, advirtió los representantes de Trabajando.com.


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.