Merece Betancourt “premio a la ingratitud”: vicepresidente

El Ministerio de Defensa se manifestó “sorprendido y apesadumbrado” por la exigencia de la ex rehén, al tiempo que recordó “el esfuerzo y empeño de la fuerza pública en la planeación y ejecución de la Operación Jaque”.
Bogotá.- El vicepresidente colombiano Francisco Santos Calderón afirmó hoy que la ex rehén Ingrid Betancourt debería recibir el “premio a la ingratitud” por exigir una indemnización de 6.5 millones de dólares por los años que estuvo en cautiverio.
En declaraciones a periodistas locales, el funcionario dijo que “las aspiraciones de Ingrid Betancourt y su familia de obtener una indemnización por su secuestro constituyen un acto de codicia, ingratitud y oportunismo”.
Tras advertir que la exigencia de la ex rehén “merece el rechazo de los colombianos y de la opinión mundial”, Santos Calderón opinó que el gobierno “no debe adelantar negociación ni conciliación alguna con ellas (Betancourt y su familia) en relación con este asunto”.
“Es un premio mundial a la ingratitud y a la desfachatez. Estoy indignado, triste y desilusionado”, sostuvo el vicepresidente de Colombia.
El Ministerio de Defensa informó este viernes que Betancourt y su familia presentaron al gobierno dos “solicitudes de conciliación extrajudicial” para exigir una indemnización de 6.5 millones de dólares por la supuesta responsabilidad del Estado en su secuestro.
La ex candidata presidencial fue secuestrada en febrero de 2002 por un comando de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y rescatada en julio de 2008 durante la denominada Operación Jaque, considerada como el golpe más contundente contra el grupo rebelde.
En un comunicado, el Ministerio de Defensa se manifestó “sorprendido y apesadumbrado” por la exigencia de la ex rehén, al tiempo que recordó “el esfuerzo y empeño de la fuerza pública en la planeación y ejecución de la Operación Jaque”.
La dependencia destacó que en esa operación militar, “mujeres y hombres de las Fuerzas Armadas arriesgaron su vida en pos de la libertad de los secuestrados”, además de que Betancourt la calificó de “perfecta”.
“No entiendo qué le pasó (a Betancourt), no me cabe en la cabeza y me parece que es un precedente funesto y una puñalada a todos los miembros de la Fuerza Pública que han muerto rescatando colombianos, a todos los que hicieron la Operación Jaque”, señaló Santos Calderón.
“En mi condición de víctima del secuestro me duele inmensamente ese que sin duda es uno de los actos de ingratitud que quedarán en la historia de Colombia y también de oportunismo y de codicia”, aseveró el vicepresidente.
En 1990, cuando Santos Calderón era jefe de redacción del diario El Tiempo, fue secuestrado por la organización del hoy extinto narcotraficante Pablo Escobar, quien pretendía presionar al gobierno para que suspendiera la extradición de narcotraficantes a Estados Unidos.
Fuente: http://www.milenio.com/node/484104