Alumnos de San Marcos no se preocupan por animales experimentales
Los alumnos de la facultad de San Fernando sorprendieron con sus comentarios sobre los animales experimentales que utilizan para sus cursos de cirugía experimental, aduciendo que “el sacrificio es necesario” para la carrera.
“Nos dan pena, pero no queda otra”, dijo apesadumbrado un estudiante del noveno ciclo de la Facultad de Medicina de San Marcos, la popular San Fernando. “Abrir a los perros es necesario; simulan el estado en emergencia de un organismo vivo. No sé por qué los medios hacen tanto alboroto”, increpó otro alumno despreocupado.
El doctor Segundo Carpio, director del Instituto de Cirugía Experimental de San Marcos que funciona en el hospital Loayza, afirmó que no hay control de la procedencia de las mascotas que llegan a las prácticas pues los alumnos simplemente los llevan y no especifican su procedencia.
Hay personas que han salvado a sus mascotas de una sala de prácticas, como Carmen Valverde, una mujer que se disfrazó de enfermera para rescatar a su perro Tomás, en agosto del 2009, del Instituto de Cirugía Experimental de la UNMSM. “La señora tiene la culpa por abandonar a su mascota; debió vigilarla”, aseguró sin culpa una estudiante sanmarquina de obstetricia.
Fuente: http://www.larepublica.pe/31-01-2011/alumnos-de-san-marcos-no-se-preocupan-por-animales-experimentales
“Nos dan pena, pero no queda otra”, dijo apesadumbrado un estudiante del noveno ciclo de la Facultad de Medicina de San Marcos, la popular San Fernando. “Abrir a los perros es necesario; simulan el estado en emergencia de un organismo vivo. No sé por qué los medios hacen tanto alboroto”, increpó otro alumno despreocupado.
El doctor Segundo Carpio, director del Instituto de Cirugía Experimental de San Marcos que funciona en el hospital Loayza, afirmó que no hay control de la procedencia de las mascotas que llegan a las prácticas pues los alumnos simplemente los llevan y no especifican su procedencia.
Hay personas que han salvado a sus mascotas de una sala de prácticas, como Carmen Valverde, una mujer que se disfrazó de enfermera para rescatar a su perro Tomás, en agosto del 2009, del Instituto de Cirugía Experimental de la UNMSM. “La señora tiene la culpa por abandonar a su mascota; debió vigilarla”, aseguró sin culpa una estudiante sanmarquina de obstetricia.
Fuente: http://www.larepublica.pe/31-01-2011/alumnos-de-san-marcos-no-se-preocupan-por-animales-experimentales
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