El deporte y el turismo son dos elementos que conjugan perfectamente,
sobre todo si hablamos de deportes extremos. En nuestro país, una
disciplina que va teniendo cientos de adeptos y que conquista
progresivamente las dunas más impactantes del desierto peruano es el
“sandboarding” - la tabla sobre arena. Un deporte de alto riesgo que
consiste en deslizarse sobre tablas especiales, a más de 80 kilómetros
por hora, sobre pendientes de gigantescas dunas catalogadas por los
expertos como las más peligrosas del todo el planeta.
Este es un encuentro con Toro Mata, la duna más alta y larga del mundo.
Un imponente ‘Apu’ de arena ubicado en el distrito de...
Acarí, en la
provincia de Caravelí, en Arequipa, que estábamos dispuestos a
conquistar. Es un coloso serrano cubierto de fina arena blanca, en donde
los sandboarders (deportistas) realizan impresionantes descensos y
espectaculares saltos en medio de un paisaje inigualable. Nos acompañan
los intrépidos chicos de Sandboarding Perú y Lima Sandboarding: hombres,
mujeres y niños extremos.
INICIOS DEL SANDBOARDING
El sandboarding se inició a principios de 1960 en las pequeñas dunas de
las playas de California en los Estados Unidos. A mediados de 1980 los
surfistas brasileños al no poder ingresar al mar por malas condiciones
climatológicas, deciden sortear dunas de 50 a 80 metros de altura en la
localidad de Florianápolis. Hoy este deporte extremo se está adueñando
de muchas playas y desiertos del Perú con jóvenes entusiastas que están
decididos a ser reconocidos por el Comité Olímpico Peruano.
Uno de ellos es Martín Guerra, precursor e instructor de la disciplina y
gerente de Sandboarding Perú, una asociación que hace cinco años
ejecuta una dura batalla para masificar la disciplina buscando
instituciones y empresas privadas que puedan auspiciar a los
competidores peruanos que defiendan nuestros colores patrios dentro y
fuera del país. “Gracias a nuestro trabajo hemos conseguido que la
Asociación Mundial Sandboarding catalogue al Perú como el país con las
tres dunas más grandes del mundo, eso va a atraer a turistas y
deportistas, con efectos positivos para nuestra economía”, asegura
or’ulloso.
Víctor Chávez, conocido como ‘Dito’, es el mejor exponente de este
deporte en el Perú. Un atleta que representa a nuestro país en diversas
competiciones internacionales tanto en la disciplina de sandboarding
(tabla sobre arena) como en snowboarding (tabla sobre nieve). Ahora
busca el apoyo del Estado y el gobierno para poder participar en las
próximas olimpiadas de invierno en Sochi - Rusia en el 2014. Toda una
promesa que podría fácilmente traernos una medalla de oro, y hacer
historia en estos juegos.
LA DUNA TORO MATA
Para nuestra travesía nos equipamos para llegar a la cima de la duna
Toro Mata, que es cosa seria. Para ello nos trasladamos en vehículos
4x4. Vamos premunidos de tablas de sandboarding, equipos de seguridad y
una desbordante adrenalina. Guías de alta montaña y lugareños nos
acompañan en la aventura, las camionetas enfrentan desafíos extremos,
hace frío y hay niebla; sin embargo los lugareños nos aseguran que
pasando la neblina encontraremos un incandescente sol, y no se
equivocaron.
Una hora después de iniciar el recorrido, sobre colinas y más colinas
de arena, llegamos a la cima a más de 1,300 msnm. Ahora iniciamos un
ascenso de 400 metros sobre sus ardientes arenas. La naturaleza nos
regala un espectáculo impresionante. Hay un manto de nubes que cubre
todo el valle de Acarí, mientras en la cima el sol abrasador quema
nuestras mejillas, estamos por encima de los 30 grados de temperatura.
“Es un deporte bien chévere, estás en contacto con la naturaleza, es muy
bueno para la salud”, nos advierte Patricia Meule, ciudadana suiza
afincada en el Perú exclusivamente para practicar este deporte.
Para el guía de alta montaña, Omar Tomayro, el desafío de Toro Mata
está en ascender a la cima, “es un cerro fósil, es una duna encima de
una montaña, es diferente a las dunas que se mueven constantemente.
Antes era un lugar adorado por los antiguos peruanos, aquí se realizaban
entierros, era un Apu para los Incas”, señala.
Tras reconocer el terreno, el equipo de Sandbording Perú y Lima
Sandbording compuesto por hombres y mujeres, empiezan el calentamiento.
En Toro Mata el descenso desde la cima hasta el pie del valle en tabla
puede durar hasta cuatro minutos. Casi un kilómetro y medio de arena.
Pocos se atreven a ejecutarlo. Luis Alpas, promotor del deporte, indica:
“Es una de las dunas más altas del Perú y del mundo, descender es lo
máximo, es adrenalina pura”.
Para los que no estamos acostumbrados a la tabla de arena el descenso a
pie es diferente. Vamos sentados, de pecho o patinando sobre la arena y
casi siempre terminas con algunos golpes en el cuerpo. Encontramos a un
grupo de turistas noruegos, impresionados por la belleza de nuestras
dunas. “Es lo más increíble, es muy bello el panorama de la montaña. Ha
sido mi primera vez en tabla, me caí varias veces, pero me divertí”,
comentan orgullosos.
Toro Mata es una experiencia inolvidable. Un impresionante Apu de arena
que nos regala la posibilidad de hacer deporte y apreciar un majestuoso
paisaje en el desierto peruano. Con historia y belleza particular.
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