Rafael Rey: “¡Me importa un carajo El Vaticano!”

Luego de los dos debates televisados que sostuvo con el analista Carlos Tapia, parecía que el parlamentario andino Rafael Rey no podía perder más los papeles en público. Sin embargo, y como se aprecia en el polémico ‘detrás de cámaras’ de la discusión Tapia-Rey, emitido por el matutino Abre los Ojos el último martes y el miércoles, el fastidio del excandidato a la vicepresidencia por el fujimorismo lo llevó a volcar toda su furia en polémicos calificativos para con.................. el Vaticano, las Naciones Unidas y hasta a su interlocutor, a quien prácticamente persiguió por el set de televisión en una pose matonesca y agresiva.

Las luces bajas indicaban que el programa de televisión había concluido. El presentador se puso de pie sigilosamente y se retiró de la mesa, dejando a los dos interlocutores del ácido debate, finalizado segundos antes, aún sentados y con la vista al frente, sin mirarse entre ellos pero atentos a todo el movimiento de camarógrafos y algún público que aún rondaba.

Mientras Rafael Rey mostraba un gesto adusto, Carlos Tapia parecía masticar algunas palabras, con los labios apretados y el evidente gesto de quien quiere reírse pero sabe que no es apropiado. Fue entonces cuando Rafael Rey volvió a la carga.

- Bueno ¿Dijiste o no que la acción más exitosa del MIR fue el asesinato de nueve policías?

- Sí. Así lo leen en inteligencia militar, en la escuela superior de guerra… respondió Tapia.

- ¡Me importa un carajo que lo lean en El Vaticano o en Lurigancho!, dijo Rey, blasfemando entre dientes.

La sonrisa de Tapia indicaba a todas luces que había recordado que Rey es numerario de la secta cristiana Opus Dei.

- No te metas contra El Vaticano, hay que defender a El Vaticano, retrucó el analista, con ironía.

- No, no bromees infantilmente. ¡Me da lo mismo dónde carajo lo lean! Las viudas, los parientes de los policías que asesinaron no merecen que digan que fue una acción exitosa. ¿Quién lo dice, Abimael Guzmán?

- No. Abimael Guzmán era terrorista, no guerrillero.

- Ah… ¿Entonces matar policías de una manera u otra es distinto?

- Nunca se calificó al MIR como movimiento terrorista.

- ¡A mí qué me importa! Una persona que va para matar policías es terrorismo… ¿Qué es el terrorismo entonces?, preguntó Rey.

- Terrorismo no es eso, tienes que leer informes de Naciones Unidas…

- ¿Sabes qué? Ya sabes dónde me meto las Naciones Unidas, hermano, yo tengo sentido común. Y con toda raza, tú, con Degregori, con Carlos Alberto Morote, con otros que piensan como tú, se dan el lujo, ¡y tienen la concha!, de ser comisionados de la CVR, para explicarle al Perú qué pasó. ¡Qué tal raza!

- Estás celoso, pues... le dijo Tapia, entre risas.

- ¿Qué? ¿Celoso yo?

Conciliador pero irónico, Tapia decidió cambiar el tema, y pasó a comentar su libro. Desafortunadamente para él, Rey no dio la impresión de ser un gran lector y mucho menos escritor, lo que dio pie a un gracioso momento para todos, menos para el excandidato fujimorista.

-Bueno, me tienes que agradecer el libro que te he regalado ¿no?, bromeó Tapia.

- Hermano, te lo agradezco mucho, voy a hojearlo, no te prometo leerlo, porque leerte es bien aburrido, hermano.

- Claro...Yo también quiero leer un libro tuyo, pero todavía no lo encuentro. Cuando lo encuentre, pues.

- ¿Yo? No he escrito. Ya voy a escribir –murmuró Rey, como aguantando una blasfemia-

- Por eso, cuando lo escribas yo lo voy a leer, y no me voy aburrir, por una cuestión de respeto a los que escriben.

- De repente te aburre, no importa. No me interesa que lo leas.

Rey, aparentemente, sintió la burla entre las palabras de Tapia, y decidió seguir monotematizando el tema. Lamentablemente, entraron a otro más espinoso.

- La cuestión es que la apuesta tiene que pagarse. Tú, que recibías cuatro mil dólares de la Comisión de la Verdad, y simultáneamente tu pensión de la cámara de diputados... Algo habrás ahorrado, con esa platita págame los 9 mil 999 soles…

- ¿Por qué le tienes odio a la Comisión de la Verdad?, le preguntó Tapia.

- Yo solo estoy afirmado un hecho... dijo Rey, intentando expresar inocencia.

- Tú tienes plata del Opus Dei, ¡no fundas hombre! A mí por qué me vas a quitar mi plata.

- Carlitos, yo no me he metido con tu familia, no te metas con la mía. El Opus Dei es mi familia, punto.

-Pero el Opus Dei no es mi familia, pues, respondió Tapia entre las risas de camarógrafos y algunos presentes.

Fue entonces que Rey se salió de control. Se puso de pie y con gesto amenazante –brazos abiertos, inclinado hacia el frente- le dijo a Tapia:

-¡Cobarde..!

- Cobarde díselo a tu mamacita, a mí no me vas a decir cobarde, afirmó el analista, aún desde la mesa, y con Rey casi encima de él.

- ¡Con mi mamá no te metas! ¿Qué me vas a hacer? Mira el miedo que te tengo. ¡Cobarde! Cobarde, mentiroso y encima ratero. ¿Qué me va a pasar?

Dicho esto, Rey comenzó a dejar sus cosas sobre la mesa, se arreglaba la camisa, iba de un lado a otro. Cuando Tapia se puso de pie para retirarse, Rey se le acercó cruzando rápidamente todo el set, gritando: “¡Ratero!”

-Ratero me dice… ¡Estamos en un estudio de televisión!- le recordó Tapia.

Y precisamente eso fue en lo que reparó el periodista Beto Ortiz, quien se vio obligado a intervenir. “Calma, calma”, les dijo. “Estamos en televisión”, repitió mientras se acercaba a los dos debatientes para calmar los ánimos, con un Rey enfurecido y un Tapia protegiéndose de un eventual ataque físico.

En lo que quizá no repararon ambos fue en que una diminuta luz roja aún brillaba a un lado de la cámara de video.

MARIANO VÁSQUEZ
mvasquez@diario16.com.pe

Fuente: http://diario16.pe/noticia/20644-rafael-rey-aame-importa-un-carajo-el-vaticano