A pesar que el ministro de Salud, Óscar Ugarte, y el presidente Alan García han señalado que era una decisión de su Gobierno lograr rebajar el precio de las medicinas oncológicas, una serie de procesos, dirigidos por funcionarios de tercer nivel, buscan seguir favoreciendo a quienes han mantenido una posición monopólica.
Como explicaron estudios del Ministerio de Salud, los precios de los medicamentos oncológicos debieron reducirse cuando el Gobierno decidió la rebaja de aranceles para su importación, sin embargo los laboratorios que importaban, lejos de reducir los precios, los incrementaron.
Según el estudio “Impacto de las medidas de inafectación tributaria en los precios de los medicamentos para el tratamiento”, realizado por la Dirección General de Medicamentos, Insumos y Drogas (Digemid), se ha demostrado que el costo de los medicamentos oncológicos se incrementó, en algunos casos, hasta el 64%.
El ministro Óscar Ugarte señaló, en su momento, que el Estado también es afectado por el incremento de los precios de los medicamentos oncológicos porque el 93% de los mismos son adquiridos por entidades estatales para proveer tratamientos contra el cáncer.
El mismo presidente García, comentando el mismo informe de Digemid, consideró que existiría una actitud “mercachifle” en algunos laboratorios, pues pese a que desde el año 2001 se redujeron los aranceles a los productos contra el cáncer y otras enfermedades, los precios han empezado a subir en contra de lo que se esperaba.
“Creo que el Indecopi tiene que entrar a actuar de la mano con el Ministerio de Salud y el Ministerio Público, porque un esfuerzo estatal (de exonerar de tributos a esos productos) no puede ser mal aprovechado, y todos tenemos especial preocupación por el tema del cáncer”, agregó García.
Sin embargo, la entrada de competencia logró lo que las burladas decisiones del Ejecutivo no pudieron. Fue el caso del producto Rituximab, dirigido al tratamiento del linfoma no Hodgkin y artritis reumatoidea.
Antes del ingreso de la competencia, el Estado debía comprar el producto que vendía Laboratorios Roche al precio de S/. 4,878. Con el ingreso de nuevos productos en el mercado se logró que para enfrentar la competencia el mismo producto (Mabthera) redujera sus precios a S/.3,124, mientras que la competencia ofrecía su producto Reditux a S/.2,495.
Como es obvio, a menor precio son más los pacientes que pueden ser atendidos, pero esto no parece ser entendido por quienes avalan prácticas mercantilistas que buscan poner barreras a la competencia, favoreciendo de esta manera la posición monopólica de algunos laboratorios.
Es así, que para evitar el ingreso de medicamentos a precios más razonables, se establecen una serie de prácticas restrictivas que incluyen procesos de apariencia legal que se producen en el OSCE (Organismo Supervisor de Contrataciones del Estado).
Al actuar ante el OSCE, se busca establecer, mediante medidas administrativas, impedimentos para el ingreso de competencia en el sector farmacéutico, contradiciendo lo que desde las más altas instancias del Gobierno se viene promoviendo...
“Esperamos que el nuevo gobierno ponga los ojos en el Tribunal del OSCE y nombre gente idónea para ocupar cargos importantes con la transparencia que el país necesita”, afirmó Gray.
Si desea leer la nota completa vaya a: http://diario16.pe/noticia/6838-negocian-con-la-muerte
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