Crecientes denuncias señalan que el gobierno saliente está nombrando y contratando apristas en diversos ámbitos de la administración pública, con el fin de entorpecer la labor del nuevo gobieno, mientras la premier Rosario Fernández dice que no hay nada de eso y que la transferencia se desarrolla en forma transparente.
La presidenta de la Confederación General de Trabajadores del Perú, Carmela Sifuentes, sostuvo, por su parte, que no sería raro que el gobierno saliente quiera copar las plazas del aparato estatal, renovando contratos, nombrando personal y contratando más militantes apristas, a última hora y sin evaluación, porque con ello buscaría “ocultar los problemas de corrupción existentes” y entorpecer la labor de Ollanta Humala.
La premier Rosario Fernández negó en diálogo con LA PRIMERA que el Ejecutivo esté realizando contrataciones o nombramientos en los distintos sectores del aparato estatal, sin embargo, anotó que no se puede dejar de hacer renovaciones de contratos o sustituciones del personal faltante, porque es necesario para continuar con el trabajo de la maquinaria del Estado.
“He tenido una conversación con la vicepresidenta electa Marisol Espinoza y hasta le cursé una carta informándole que ya la recomendación está hecha en los ministerios, pero que el funcionamiento del aparato estatal es algo que no se puede detener, por lo que si hubiera alguna urgencia de reemplazar al personal por enfermedad, renuncia o fallecimiento entonces esos lugares se tienen que cubrir por la necesidad del servicio”, refirió a LA PRIMERA.
Fernández explicó que, de no realizar este proceso de renovación de contratos (aunque se negó a llamarlo así), el nuevo gobierno no encontraría personal para continuar con el proceso de transferencia tal como lo indica la ley.
En ese sentido, indicó que los contratos administrativos de servicios tienen un plazo y su período, por lo que no puede decirle a “todo el mundo que tiene CAS, que tienen diferentes plazos de vencimiento, que el 30 de julio se vaya, porque viene el nuevo gobierno, abre la puerta y no encuentra a nadie. Por lo menos, tiene que haber personas que den cuenta de la transferencia”.
Sifuentes sostiene que no sería malo contratar y hasta nombrar a los trabajadores por sus méritos, producción y trayectoria, “pero sabemos que el gobierno saliente quiere copar todas las plazas con el fin de tapar la corrupción y allanar el camino con miras a volver al poder el 2016” y estos no son intereses de la clase trabajadora. Por ello, calificó como “malicioso” que el gobierno de García esté tratando de extender los contratos de sus trabajadores justo ahora, a 40 días de dejar el poder. “Qué bueno que eso se hubiera dado todo el tiempo. Sin embargo sabemos que este privilegio lo están dando a la gente del Partido Aprista y no a los que realmente se lo merecen”, expresó.
Rosa María LoayzaRedacción
Fuente: http://www.diariolaprimeraperu.com/online/noticia.php?IDnoticia=88435
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