Un grupo de primates de una reserva natural de Indonesia agarró el equipo del fotógrafo que los acompañaba y realizó una divertida sesión
(Captura: guardian.co.uk)
Un grupo de macacos negros crestados (macaca nigra) tomó la cámara del fotógrafo que por unos días los acompañaba, David Slater, y empezó, sin querer queriendo, con una divertida sesión de fotos. ¿El resultado? Un puñado de imágenes con personalidad.
Slater indicó que puso su cámara en un trípode y dejó su equipo por un momento. Cuando regresó vio una escena alucinante: los primates estaban ‘jugando’ con ella. De pronto, uno de ellos apretó el botón y tomó, sin querer, una foto. Interesados por el ruido, los monos empezaron a disparar sin parar y a hacer muecas frente al aparato, según contó Slater. “Deben haber tomado cientos de fotos para el momento en el que logré recuperar mi cámara”, explicó.
Slater estuvo 3 días con los monos, intentando entablar una conexión con ellos. “No mostraron ningún tipo de agresión, solo estaban interesados en las cosas que llevaba”, explicó.
La autenticidad de las fotos fue cuestionada en Twitter. Sin embargo, Slater dijo que estas eran totalmente verídicas. “Debido a sus ‘peinados’ y ojos rojos ellos lucirían extraños sea como sea”, afirmó.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.